El campo de Education City tiene calles más amplias, pero dar rienda suelta a tu drive desde el tee no siempre es la mejor idea. Hay muchos más búnkeres y nueve de los 12 lagos son parte del recorrido del campeonato.

Sin embargo, la clave para hacerlo bien es un juego corto y fuerte. Conocido por sus impecables habilidades en los greens, Olazábal ha exigido una destreza similar por parte de los que juegan en su diseño.

Michael Braidwood, director general del Education City Golf Club, dice: “Ese es el toque Ollie del campo de golf. Los greens son ligeramente elevados, hay muchas pendientes sutiles y zonas de escurrimiento. Para anotar bien, tienes que estar a tono con tu juego corto”.

El campo es un par-72 para los socios, pero el 18 par-5 se convierte en un par-4 durante el Qatar Masters. El hoyo más difícil en el campo es el 9 par-3, jugando más de 200 m desde los tees traseros con un arrastre de agua.

Hablando sobre el estado del juego en Catar, Braidwood dijo que no se sorprendería si apareciesen varios campos de golf nuevos en los próximos años.

“Todo el foco está ahora en el fútbol debido a la Copa Mundial de la FIFA el próximo año. Pero, dado el éxito que hemos tenido, al igual que el Doha Golf Club, no me sorprendería si apareciesen algunos más pronto”, comenta Braidwood.

“Desde que se levantó el bloqueo por la pandemia, ambos clubes han tenido muy buen nivel de actividad. Incluso en el verano, estamos teniendo un 20 % más de actividad en comparación con años anteriores. Y vale la pena tener en cuenta que, con las restricciones de viaje, todo este tráfico se debe a los golfistas nacionales. Te puedes imaginar la situación cuando empecemos a recuperar a los turistas.

En nuestra academia y en el Centro de Excelencia, ahora tenemos cerca de 300 niños en nuestros programas juveniles y más familias están probando nuestros campos de 6 hoyos y de par-3. Se está complicando responder a la demanda”.